martes, 30 de septiembre de 2014

Un nuevo GRAN parque de aventuras...... JORASSES

Llevábamos un par de semanas mirando la meteo y decidiendo cuando subir. Estaba cambiante, tanto la meteo como los planes, era mi primera vez; y como lo de desvirgarse no es algo muy habitual... estaba que me subía por las paredes! Pero bueno, al final parece que pudimos cuadrar y, junto con Edu y el pequeño pandereto, pusimos rumbo a Chamonix.

Después de un ininterrumpido trayecto de soltar y soltar y soltar money llegamos a una de tantas Gites de Chamonix, donde vengaaaaa, a soltar un poco más. En la cual había estado Edu hace unos años y no se parecía nada el precio de su memoria al que nos dijeron en perfecto inglés. Y si se te ocurre tomarte una cerveza prepárate!! 

Aproximando a la base de la pared.

Al día siguiente nos ponemos en marcha, con una mochila ni muy grande ni muy pequeña y con las patas frescas frescas. Habíamos quedado con los gallegos Carlos y Juan, pero no nos pillaron hasta llegar al vivac debajo de la pared. Y allí la vimos, imponente y majestuosa; la mítica MacIntyre-Colton. Un tanto desmitificada por todas las cordadas que se habían subido por ella a lo largo del último mes. Aun con todo, sabíamos que no era algo fácil y que nos haría sudar; dejándonos con un estupendo sabor de boca cuando llegásemos al top. Si lo lográbamos, claro está.

Como Edu estaba romanticon, decidió llevar un saco de kilo para los dos.. y... bueno.... ya pasamos unas horicas tumbados en nuestro duplex. Pero tranquila Marta que no paso nada eeee!! Soy del norte, cerrau, y no me dejo fácilmente... :)

En los primeros largos del escudo, después de pasar la rimaya vertical.

Nos esperábamos la guerra, así que decidimos empezar a escalar en horario party; a las 23:00 sonó la alarma!! Y me parece que fui el único que consiguió dormir una hora a cachitos cortos. Un café con dos barritas de muesli y a picar. La noche era estrellada, sin apenas aire, sin ni una sola nube, sin demasiado frío... era perfecta! Lo único las 7 frontales que veíamos nos seguían por el glaciar.

Nene caca.... oooogggg..

De noche parriba y parriba, hasta pillar a la única cordada que llevábamos por delante. Así que nada, a esperar un poco. Pero entonces, me se ocurrió bombardear a los señores gallegos and compani que venían por detrás...jejeje ya lo siento Juan!! No siempre lo que cae de arriba son purgas de nieve, hielo o roca.

Llegando a los mixtos.

Las horas fueron pasando y amaneció. Y nosotros llegamos a los mixtos. Todo iba sobre ruedas. El largo que llamaban "crux", situado entre la segunda y la tercera campa, nos lo encontramos con el hielo un poco bastante podrido y picado, de tanta gente que había pasado. Pero con calma y buena letra, se dejaba.

En los mixtos 

Los mixtos... la guinda del pastel, que buenos!! Entretenidos y en algunas secuencias un poco finos. Te dejaban protegerte bien, te hacían pensar, y te dejaban disfrutar como un enano!!!

El chaval iba tan rápido que no me daba tiempo ni de recuperar las cuerdas

La verdad es que, a cerca de este lugar, tenía una idea un tanto diferente. Había oído historias de las vías de las Grandes Jorasses, conocía a amigos que llevaban años visitándolas de manera ocasional y ufff, todo era frío y oscuro. Que si los vivacs de pan bimbo con nutela de la MacIntyre-Colton, que si el intenso frío de esta pared, los malos vivacs que la caracterizan, los rescates de conocidos, todos los que han pillado cacho por estos muros (los cuales luego en las discotecas no deben tener tanta suerte...jaja), etc, etc, etc.

Con esto lo que quiero decir que iba un poco acojonado; pero con ganas, con muchas ganas.

El lugar va ganando ambiente y vacío. El glaciar de fondo... sin palabras!

Y la realidad fue que... tuvimos mucha suerte!! Porque nos hizo un tiempazo, sin apenas frío ni viento y sin nubes al horizonte. Tengo claro que todas esas historias entretenidas que había escuchado no tenían ni pizca de exageración ni de mentira, por lo que me ayuda a afianzar con más peso la idea de que esta pared no suele poner las cosas fáciles. Pero también, como a muchos esta última temporada, le llega la época "paternalista" y se deja engañar para que los menos expertos podamos subir y disfrutar de sus joyas escondidas.

Rodeados de muros de roca verticales, la línea busca su
escapatoria acercándose al espolón de la Walker.

Eso sí, tengo que decir que cuando vimos parte de la pared desde el punto donde te deja el tren de Montenbers... ejemmm.. un huevo se bajó en el mismo tren que habíamos subido a esperarnos en Chamonix y el otro cogió el primer vuelo a Iruña!! Aunque, ese punto de acongoje, de miedo, de tensión; si lo podemos llegar a controlar, sin perder las riendas, es el que nos deja hacer actividades  más duras o comprometidas; las cuales sin él no lograríamos realizar. Dicho de otro modo, es la principal fuente de motivación interior. El fuego que recorre nuestras venas.

Penúltimo largo, esto ya se acaba.

Dejando de lado este breve paréntesis, volvemos a la vía.

Y de repente, cuatro pioletazos más y... si ya se ha acabado! Joooooooo
Según dicen es una pared fría, sombría, larga, difícil, etc. La idea que se me quedó en la cabeza no fue esa. Disfrutamos como cuando eres niño y juegas con tus juguetes nuevos, escalamos muchas horas, silbamos, cantamos, pinchamos a más no poder, rayamos y destrozamos el material... que más se puede pedir!!! Incluso alguno bostezó por la parte de arriba, pero no de aburrimiento.. jajaj

Vistas desde la punta Walker.. grandioso!

Al salir al lado sur el sol nos abrasó; venga a quitarse ropa! Mirabas para abajo y veías el valle italiano allí mismo, casi lo podías tocar, pero era un engaño, porque nos separaban 3000 metros de desnivel; de los cuales dos mil eran una tortura de bajada. Pero chino chano, los cuatro juntitos, fuimos bajando por el "mejor" camino. 

Edu, Juan, Carlos y el del esparadrapo en el casco. Buena cuadrilla!!

24 horas después de salir del saco al otro lado de las Grandes Jorasses, llegamos a unas rocas encima del refugio de Bocalate, y sin pensarlo dos veces, allí nos tiramos a descansar y a comer esos ricos diofilizados. Que tantas horas a barritas... no ser bueno! Allí coincidimos con Ekaitz y Javi que venían de hacer otra vía. Hasta en el culo del mundo te encuentras con amigos, que cosas!

Nuestro ático con cama de matrimonio.

A la mañana siguiente, por fin al solete, nos levantamos con la calma y para abajo. Miramos hacia arriba y allí íbamos dejando el glaciar empinado y las malditas "rocas del reposo". Menudos nombres se inventaron!! Pasamos por el curioso refugio de Bocalate, situado en un lugar inusual (es decir, que no lo encuentras de noche y sin conocerlo ni borracho), y intentando no pensar en el recocimiento de pies y espalda que llevábamos, bajamos hasta Courmayeur.

En definitiva, una salida espectacular! La cual habrá que repetir!! Si alguien me pregunta que es el Alpinismo, creo que ya tengo la respuesta. Nunca lo he tenido claro como lo definiría o que aspectos metería dentro y cuales dejaría fuera. Después de conocer estos parajes, creo tenerlo más claro. Es una sopa en la que se mezclan muchas letras. 

Alguien sabe que Erasmus se hace en Chamonix????? :) jejej